Jorge Lanata partió de este mundo el pasado lunes 30 de diciembre, rodeado de sus hijas, Lola y Bárbara Lanata, y de su esposa, Elba Marcovecchio. A las 15.20 horas confirmaron su fallecimiento y una profunda tristeza invadió al mundo del espectáculo.
Desde las principales figuras a aquellos periodistas que tuvieron roces con Lanata a partir de sus diferencias políticas, mostraron respeto. Su partida marca para siempre un antes y después, y aseguran que no habrá otro igual a Jorge, profesionalmente hablando.
Uno de los famosos que más sentido se mostró por su partida fue Alberto Cormillot, quien se expresó hasta las lágrimas. Visiblemente afectado por la situación, dio su punto de vista desde sus conocimientos médicos y habló del delicado estado de salud que atravesaba Lanata en sus últimos meses.
“Uno sabía que era muy difícil. Había un organismo que estaba muy golpeado. Jorge siempre sorprendía con sus casi milagros. En el fondo era mucha cirugía, infecciones, obesidad, diabetes. Un asunto extremadamente complicado. Son 10 años menos de vida, a veces hasta 20 cuando juntas todos los factores de riesgo. La estadística de lo que pasa en la mayoría de casos. A él le daba mal”, comenzó diciendo Cormillot.
ALBERTO CORMILLOT SE REFIRIÓ A LA MUERTE DE JORGE LANATA
Conociendo a fondo todo lo que respecta a la obesidad, ese era uno de los grandes problemas que enfrentaba Jorge. Tristemente se fue deteriorando mucho en sus últimos siete meses de internación en donde el desenlace fue el peor.
“Cuando hablamos de falla multiorgánica nos referimos al endotelio, la parte interior de las arterias que tiene que ser muy liso y parejo. Tiene muchas funciones y cuando hay un estado inflamatorio crónico el mecanismo produce defensas que se manifiesta con inflamación”, comentó Alberto en CNN Radio Argentina.
Y además, opinó: “Eso va dañando el interior de las arterias y produce una lesión de la llegada de oxígeno a todas las partes del cuerpo. Ahí dejan de funcionar varios órganos. Son casos irreversibles. De Jorge recuerdo su capacidad de atención y su mirada distinta. Iba más allá de la mirada que tenemos nosotros. Capacidad superior y una lucidez para interpretar las respuestas”.