Un empleado del Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) quedó en el centro de un escándalo por presuntas estafas reiteradas a vecinos de Villa La Angostura. Una docente jubilada denunció haber pagado más de $390.000 por una supuesta reparación obligatoria que resultó ser completamente falsa. El operario, que utilizaba vestimenta oficial y una camioneta del organismo, ya estaría implicado en al menos una veintena de casos similares.
La denuncia fue presentada ante la Justicia y el propio EPEN. Según el relato de la víctima, el hombre llegó a su casa y aseguró que era obligatorio cambiar el medidor eléctrico debido a una nueva reglamentación. La amenaza de un inminente corte de luz fue clave para que la mujer accediera a pagar con sus ahorros: $150.000 por la supuesta mano de obra y $243.471 por materiales. El abogado de la docente, Cristian Pettorosso, confirmó que el operativo fue un engaño total.
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El procedimiento fue presentado como urgente, lo que impidió a la mujer verificar su veracidad. Sin embargo, tras hacer consultas en las oficinas del EPEN, le informaron que no existía tal normativa y que ningún trabajador está habilitado para realizar servicios eléctricos particulares fuera del organismo. Además, desde el ente aclararon que cualquier cambio técnico se notifica previamente y por canales oficiales.
Investigaciones preliminares revelaron que el operario habría replicado esta modalidad con otros usuarios. Fuentes consultada indicaron que el hombre utilizaba su rol real dentro del EPEN para detectar problemas menores o exagerarlos, y así justificar una intervención paga. “Entre $300.000 y $500.000 por cada trabajito”, detallaron. Siempre con el argumento de que, si no se actuaba rápido, el desperfecto podría afectar la red eléctrica.
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El caso se encuentra en sus primeras etapas judiciales y aún no hay declaraciones oficiales del EPEN ni resoluciones por parte de la Policía o la fiscalía, aunque se espera que en los próximos días se sumen más denuncias.