A seis días de la desaparición de Lian Flores, la casa de curandera jujeña conocida como «La Abuelita«, bajo investigación de la Justicia cordobesa por su posible vinculación en la desaparición del niño, fue allanada este jueves y se le incautaron elementos clave para la causa.
En Perico, Jujuy, agentes policiales realizaron un allanamiento en el domicilio de «La Abuelita», en busca de pruebas relacionadas con su llegada a Ballesteros Sud, poco antes de la desaparición del niño de tres años.
Durante el operativo, se secuestraron celulares, pasajes de colectivo y un bolso con ropa, materiales que serán sometidos a análisis.
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La mujer y otras cuatro personas que residen en la misma vivienda fueron citadas para declarar. Tras las pericias, ninguno de los involucrados fue detenido.
José Alfredo Blanco, fiscal a cargo de la investigación, brindó detalles al medio El Tribuno. Afirmó que la mujer de 74 años se identificó como curandera y explicó que viaja con frecuencia a Córdoba para asistir a «integrantes de la comunidad boliviana».
Los puntos clave de la desaparición de Lian y el operativo de búsqueda
Un dato clave en el caso es que la familia de Lian es de nacionalidad boliviana y reside en Ballesteros Sud desde hace años.
«Declaró que viajó a Córdoba el 14 de febrero y regresó el sábado 22, llevando consigo un bolso grande con ropa», agregó el fiscal.
«Al finalizar el operativo, consultamos a la Fiscalía de Córdoba sobre la posible detención de la mujer, pero nos respondieron que no, que se debía continuar con las entrevistas a todos los habitantes de la vivienda, incluyendo al marido y a los hijos”, dijo.
Durante la declaració, la mujer también indicó que “no tiene parentesco con el niño desaparecido«, agregó Blanco.
Finalmente, el fiscal detalló que, según lo expresado por la mujer, “en Córdoba realiza curanderismo, y aunque pertenecen a la comunidad boliviana, tienen una situación económica más acomodada. Además de recibir pagos, ella lleva ropa, calzado y juguetes, los cuales distribuye entre familiares y conocidos”.
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Ofrecen recompensa de $20 millones a quien aporte datos para encontrar a Lian Flores
A seis días de la misteriosa desaparición de Lian Gael Flores Soraide, en la localidad rural de Ballesteros Sud, en la provincia de Córdoba, el gobierno de Córdoba, en conjunto con el Ministerio de Seguridad de la Nación, dispuso una recompensa de 20 millones de pesos para quien aporte información verificable que permita dar con el paradero del menor, desaparecido desde el sábado 22 de febrero.
El pequeño Lian, de tez trigueña, cabello corto negro y aproximadamente 90 centímetros de altura, fue visto por última vez en las inmediaciones de su vivienda, ubicada en una zona rural cercana a un cortadero de ladrillos.
Según relataron su padre, Elías Flores, el niño desapareció mientras la familia dormía la siesta, en una jornada marcada por altas temperaturas. Al despertar, cerca de las 17 horas, notaron su ausencia y, tras buscarlo sin éxito, alertaron a la policía local alrededor de las 19:00. Desde entonces, un operativo masivo de búsqueda se desplegó en la región, sin que hasta el momento se hayan encontrado pistas concretas.
La recompensa, anunciada este jueves, es fruto de un esfuerzo conjunto: el gobierno provincial, liderado por el gobernador Martín Llaryora, aporta 10 millones de pesos, mientras que el Ministerio de Seguridad Nacional, a cargo de Patricia Bullrich, contribuye con la otra mitad.
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Según el decreto firmado por Llaryora, el objetivo es incentivar a la comunidad a brindar datos que puedan esclarecer el caso, que mantiene en vilo a la sociedad cordobesa y al país entero. Sin embargo, también advirtieron que proporcionar datos falsos o intentar desviar la investigación podría derivar en graves consecuencias legales.
El operativo de búsqueda, que hoy cumple su séptimo día, involucra a más de 300 efectivos, incluyendo policías provinciales, fuerzas federales, bomberos, el Ejército y personal especializado del Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (SIFEBU).
Además, se emplearon drones con visión nocturna y detección de calor, perros adiestrados, kayaks para rastrillar el río Tercero y un helicóptero que sobrevuela la zona. A pesar de estos esfuerzos, hasta este viernes, no se sabe nada del niño desaparecido.
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